Convergencia evolutiva: un ejemplo de los mismos rasgos en distintos linajes
La convergencia evolutiva es un proceso que ilustra el poder de la selección natural.
El mismo nicho ecológico se llena de manera muy parecida en distintos continentes por organismos que no tiene ninguna relación entre ellos.
La oportunidad que ofrece el mismo nicho da como resultado la evolución de fenotipos similares.
El ejemplo más famoso son los marsupiales de Australia. Evolucionaron en un continente donde no había euterios (placentarios o mamíferos de placenta), pero produjeron tipos análogos a los euterios que evolucionaron en los continentes del norte.
El Thylacine o lobo de Tasmania es análogo al lobo de placenta, las ardillas voladoras son análogas a los falangeros voladores, los ocelotes a los gatos marsupiales, hay osos hormigueros placentarios y marsupiales, hay ratones placentarios y marsupiales.
Hay infinidad de ejemplos de convergencia en vertebrados y también los hay en plantas.